Hola. Hoy hemos salido de paseo un poco más temprano para poder aprovechar el día, que es corto en el invierno de por acá. Primero fuimos a unas alturas en las montañas cecanas, desde donde se puede contemplar todo el valle y las tres ciudades -Irún, Hondarribia, y Hendaya- a vuelo de pájaro. Se podía ver, a un lado el Cantábrico, y al otro la bahía de Txingudi con la desembocadura del rio Bidasoa, y las tres ciudades mencionadas. Una muy linda vista, un bello sitio en las montañas que rodean Irún.
Luego visitamos una pequeña capilla llamada de Nuestra Señora de Guadalupe, que domina desde lo alto el valle del Bidasoa; se la puede apreciar desde casi cualquier sitio estando allá abajo.
Ya bajando Antonio me llevó de recorrida por el muy antiguo y amurallado pueblo medieval de HONDARRIBIA o FUENTERRABIA, que es una cosita, una pieza de colección para los que gustamos de ese tipo de pueblos. Fue fundado por el rey godo Recaredo hace muuuuchos centenares de años. Entramos por uno de los portalones de la muralla. Ya en su interior las calles son empedradas y muy estrechas, para carros, con senderos a los costados por el que no pasa un auto. Las construcciones -antiguas aunque recicladas pero conservando las fachadas- se caracterizan por las balconadas, a cual más bonita. No hay casa que no tenga balcones a la calle, y son todas de tres y cuatro pisos, balcones con macetas con geranios, pintados de colores, parecido a nuestro barrio de La Boca.
Tiene una plaza de armas, de empedrado antiguo, con un hostal llamado Carlos V, todo con un aire de siglos y de mar. Saqué unas cuantas e imperdibles fotos que ya las van a ver.
Seguimos viaje hacia otro pueblo llamado LESAKA (dice Antonio que es la capital de "Lemete"), bien vasco, vasco hasta la maceta. Había algarabía en sus calles por ser hoy 24 de diciembre y festejar ellos tradiciones locales. La de hoy era la leyenda del OLENTZERO, que es un carbonero vestido a la usanza, un buen hombre, que se sentía solo y empezó a hacer regalos a los niños; pero al niño que se ha portado mal le deja solamente carbón. La cosa es que ponen en la plaza del pueblo figuras del olentzero y varios se disfrazan del tal; los niños van a verlo y se arma ya la fiesta. Lesaka es un pueblo de unos 5.000 habitantes y sus casas, aunque siguen un estilo uniforme, no repiten fachada, entonces no hay dos iguales. La pequeña y pintoresca ciudad está cruzada por canales de agua, que serpentean por todos lados y en ocasiones pasan por debajo de las viviendas.
Acá no hay casas como las que tenemos allá. El tipo de vivienda es un edificio de 2, 3 o 4 plantas, con 3 o 4 departamentos amplios por piso. Esos edificios, por afuera muy lindos y cuidados, están unos al lado de los otros. De manera entonces que es un estilo diferente al nuestro y que llama la atención. No es el concepto de vivienda unifamiliar en planta baja ni el típico edificio de departamentos que conocemos; es distinto. Esos edificios bajos están muy bien cuidados, pintados y en forma.
Esta mañana noté algo raro y es que las casas de planta baja ponen los tendederos de ropa del lado de afuera por la ventana, de manera que quedan directamente en la vereda. Vi varios con la ropa colgada y entonces la gente que pasa por la vereda queda con la ropa al alcance de la mano. Pues que nadie toca nada, aquí a nadie se le ocurre llevarse nada de esos tendederos. Lo mismo pasa con las macetas, las ponen en las veredas o en lugares muy a la mano y a nadie se le quedan pegadas al pasar; tampoco las rompe ninguno. Indudablemente eso no pudo dejar de llamarme la atención.
Bueno, saludos y que tengan hoy una Feliz Nochebuena.
Corto aquí siendo en esta tierra casi las 23 hs. del 24 de diciembre.
Mario
miércoles, 24 de diciembre de 2008
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
Hola: Jajaja. Bonita relato. Te escribo desde Catalunya, aunque soy donostiarra y conozco el Bidasoa porque mi madre era de Lesaka. Este pueblo tiene unos 2700 habitantes y aunque sea la capital de Lemete ;-) La etimología viene de "Latsaga", que quiere decir abundancia de arroyos. Un saludo.
ResponderEliminar